Monday, 18 January 2010

Jefes

En este horrible mundo carente de justicia de cualquier tipo, existen algo llamado "los jefes". Ellos son figuras de autoridad, que usualmente la adquirieron por casualidad, herencia o métodos cuestionables. En contadas ocasiones la gente suele ponerse a disposición de alguien sólo porque es lo que quieren.

Así, la vida es una constante etapa de jefes tras jefes. Estos seres son tan odiados que en los videojuegos nos encargamos de deshacernos de ellos y el juego no termina hasta que el último jefe haya muerte. A veces hay jefes secretos aún peores y con más razón hay que matarlos. Pero la sociedad no funciona así, ya que muchas veces hasta nosotros mismos somos jefes para algún otro personaje y no podemos solo estar matándonos unos a otros.

Se habla de jefes laborales, jefes familiares, jefes de estado, jefes de gobierno, jefes de laboratorio, jefes de colonia, jefes de cocina, et cétera. Habiendo una autoridad cada vez más alta, uno pensaría que llegaría el punto donde un individuo careciera de jefes, de gente que le dijera qué puede o debe hacer. Desafortunadamente esto es casi imposible de alcanzar.

Por ahí a veces se menciona lo de "ser tu propio jefe", que algunos dirían que paradójicamente cierra el círculo en uno mismo y se acaba con el problema, pero no, uno sólo es jefe de una cierta organización, pero en realidad tiene numerosos jefes que son sus clientes y de quienes tiene que acatar ciertas órdenes. O si tiene una empresa que sólo lanza sus productos, igual el mercado le dirá cómo tiene que irlos haciendo. No nos engañemos, cuando uno trabaja, lo hace para alguien.

Si uno piensa en un presidente, su jefe se vuelve un ente abstracto, que es la sociedad y aún así, hay partes donde el presidente carece de poder en algunas áreas y es limitado por otros organismos que son sus jefes en dichas áreas. Así que alguien sin jefes debe ser un gobernador absoluto, como un rey. Pero a la vez, el rey debe ver por su pueblo y aunque en la historia muchos no acataron esto, sólo estaban desobedeciendo al ente abstracto que era su jefe y eventualmente terminaba de mala manera esta relación.

Pero igual hay cosas parecidas a reyes que no acatan esto; como lo son los dictadores y emperadores. Ellos en realidad no escuchan a nadie, no tratan de complacer a nadie y cualquiera que desobedezca es castigado. Una jefatura absoluta de mano de hierro. Para llegar a este punto, estos personajes suelen desconectarse socialmente de muchas maneras como: proclamación de divinidad, locura, delirios de grandeza o alguna otra forma de llamarse superiores o necesarios en el mundo.

Así, una forma de acabar con la línea de comando es separándose de la sociedad misma que funciona en base a ella, colocándose por encima de la misma. De manera muy similar, se puede uno colocar por debajo de ella para evitar todo esto, siendo un vago, un hippie, un ermitaño, un artista, un tipo meditando en un templo... que básicamente todos son lo mismo, un tipo sucio que no sabe nada de tendencias de actualidad (para bien o para mal).

En un videojuego, usualmente el emperador es el último jefe, pero el vago suele ser un NPC que no sirve para nada o fue alguien importante, pero que de todas maneras ya es bastante inútil como para dar algo más que consejos de loco.

1 comment:

Kluzter Benavides said...

Me gustó pero lo que no me agradó tanto es que me fue muy difícil hallar algo que echarte en contra en ese post... pero no lo hay. creo que sólo concuerdo contigo.

Es como cuando intenté explicarle a alguien que nosotros no controlamos nuestros pensamientos. Eso lo leí de alguien en un libro de filosofía y me pareció super mega cierto. Casi como lo que pones en este post